¡Precaución! El sitio no puede garantizar que el texto tenga permiso de edad. El sitio no es recomendado, si tienes menos de 18 años.
El sitio muestra frases de ejemplo para palabras. ¿Cómo se podría usar la palabra en una frase?
" ... Mientras estudiaba la carrera de derecho en Barcelona conocí a un grupo de fiscales, jueces y secretarios judiciales, entre los que se encontraban Carlos Jiménez Villarejo, José María Mena… que integraban un movimiento clandestino llamado Justicia Democrática, y empecé a asistir a sus reuniones. Posteriormente, junto a Cándido Conde-Pumpido y Luciano Varela Castro, fundamos Jueces para la Democracia, que era una asociación profesional progresista solo para jueces, y que tuvo su importancia, ya que ocupamos portadas en El País cuando entonces era un periódico fuera de toda duda y con prestigio, y la verdad es que influimos bastante en los aspectos judiciales de la Constitución. Y el paso a la política pura se produce desde el Consejo General del Poder Judicial, cuando soy designado a propuesta de los socialistas. Entre otros muchos temas, me tocó coordinar la negociación de la primera reforma salarial seria de la judicatura, siendo ministro Enrique Mújica. En un momento determinado, mientras yo estaba dando una conferencia en una universidad de verano, me comunicaron que me llamaba el presidente; en ese momento pensé que se refería al presidente del CPGJ, Pascual Sala, y dije que esperara. Después me enteré que la llamada era del presidente del Gobierno, Felipe González. El argumento que me dio para ser ministro fue: “¿no dices que la Justicia tiene solución?, pues a resolverla, que esa es tu obligación”. Me habían recomendado para el Ministerio Pascual Sala, por un lado, y, sobre todo, Francisco Tomás y Valiente, que probablemente es el hombre civil más importante del siglo XX, y que fue asesinado miserablemente por esa banda de hijos de puta. La única vez que yo he tenido ganas de pegar un tiro a alguien fue el día en el que lo mataron, porque encima el que lo hizo no sabía ni quien era. ... "
" ... Y sin embargo, esa es una de las mayores ventajas del teléfono: ahorra tiempo. Es mejor que enviar mensajes de texto. Es mejor que el correo electrónico. Es mejor que la videoconferencia (que, de acuerdo, es como el teléfono, excepto por la preocupación añadida de la apariencia). Es la mejor forma de comunicación en los negocios, precisamente porque es una forma de interacción directa. El teléfono ilustra perfectamente una verdad clave: si tiene muchos reparos a ponerse en una situación en la que se siente un poco incómodo, entonces hará todo lo que esté en su mano para salir de ella y resolverla lo antes posible. Ha hecho un esfuerzo. Se has preparado para los problemas que conlleva el hablar por teléfono. Está listo para lidiar con un silencio incómodo. Está listo para seguir adelante. ... "